EN DEFENSA DEL PREMIO CERVANTES CHICO (3)

EN DEFENSA DEL PREMIO CERVANTES CHICO
(3)

 

SEGUIMOS HABLANDO DE CERVANTES

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NO HAGAS AFIRMACIONES QUE NO SE SOSTIENEN

“…directamente, pide su expulsión”

Si se refiere a la Asociación que preside, debe usted decir dónde, cuándo cómo, en que línea, en qué texto se pide esa expulsión. Mientras lo encuentra, pregúntese cómo es posible y para qué se pide la expulsión de alguien que ya se ha ido y que ya no pertenece al grupo del que, supuestamente se le quiere expulsar.¿Cómo se puede expulsar a uno que se ha ido?Sencillamente, no se puede.¿Para qué se pide la expulsión de alguien que se ha ido?

Sencillamente, no se ha pedido.

Sigue la farsa.

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OTRA ACLARACIÓN

“… la gran mayoría de premiados los eligió en su día esta asociación”.

Los premiados los ha elegido siempre la Concejalía de Educación y posteriormente el Jurado.

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¿QUIÉN HA CAMBIADO DE IDEA?

 

“Habla Vd., Sr. Asesor, de que fuentes autorizadas le han dicho que el Premio Cervantes Chico pertenece exclusivamente al Ayuntamiento”.

El Ayuntamiento se lo dice a todo el mundo en las bases del Premio publicadas en su página web y que nuestros lectores pueden consultar en la dirección que ya hemos dado:

 

“El Ayuntamiento es la institución organizadora del Premio Cervantes Chico. Contará para ello con la Concejalía de Educación y en su caso con aquellos servicios municipales que resulten necesarios”.

 

Por si alguien no lo entiende, añade:

“Corresponde al Ayuntamiento a través de la Concejalía de Educación realizar el nombramiento de los miembros del jurado”.

 

Sigamos…

 

“Vaya, cómo ha cambiado Vd., Sr. Asesor, ya que durante todos estos años ha defendido Ud., ante mí todo lo contrario”.

 

El único que todos estos años ha dicho todo lo contrario de la verdad es el que quería hacernos creer que pertenecía a la organización.

 

Todas las personas que ahora dicen que el Premio Cervantes Chico está organizado por el Ayuntamiento y antes decían otra cosa, no han cambiado de idea… Han cambiado de información.

 

Ahora hay una información veraz que proviene del Ayuntamiento, que afirma  rotundamente que es él el que organiza el Premio.

Así que no es cuestión de gustos de deseos o de cambiar de idea. Es cuestión de información. Y la información es muy clara.

 

 

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¿PERDÓN?

Otro párrafo interesante:

“En el fondo, lo que subyace de su cabreo por mi actitud en esa reunión, cuando decidí levantarme e irme como le había anunciado previamente al edil, es que Ud., Sr. Asesor, no soporta la libre opinión ajena cuando discrepa con la suya”.

¿Cabreo por privarnos de su presencia?

¿Cómo no se puede soportar la libre opinión de alguien que no está y que no opina?

Vino, gritó y se marchó. Salvo el Edil, nadie le pidió que se quedara. Nadie puede estar enfadado por su marcha.

De todas formas, la secuencia está clara: en una sesión de Jurado hace una “defensa numantina” que resulta ser una farsa y al año siguiente, se marcha al inicio de la sesión, dejando una carta de despedida.

¿Quién está cabreado?

 

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